
Hay un tipo de hombres que no valoran lo que tienen hasta perderlo.
Dentro de estos hay unos -muy concretos- que son bien conscientes de que hasta que no lo pierdan todo no alcanzarán a poner en valor aquello que una vez fue suyo; y así viven constantemente en un bucle melancólico de aúpa.
Tantos a unos como a otros se les distingue enseguida, y yo habré conocido a alguno, pero no me di cuenta de cómo eran hasta que no los perdí para siempre de vista.
Y los días van pasando: espero que estéis bien.
4 comentarios:
yo también conocí a varios de estos. y qué quiere que le diga, me parecieron unos muermos.
saludos.
Y los días van pasando.... y algunos, desde el otro lado, esperamos estos bocados de prosa con avidez.
Un abrazo,
I.M.
oiga Vd.! déjese de historias y escriba.
écrivain, écrive!
El único consuelo para ese tipo "muy concreto" de hombres es que por lo menos la pérdida nunca les resultará una gran sorpresa. No lo hace mejor pero quizás un poco sí.
Espero que no te alcanze ese "bucle melancólico de aúpa".
Un abrazo grande allí donde pares ;)
Publicar un comentario